ARTÍCULO DE OPINIÓN
Comissió del Parc Nord
Con la idea de dignificar la antigua riera que linda los barrios de Can Deu, la Plana del Pintor, Sant Julià, Ca n’Oriac, El Torrent del Capellà y Torreguitart, en el 1999, se constituyó la Comisión del Parc Nord, integrada por las asociaciones de vecinos de los barrios del Distrito 3 instando al Ayuntamiento que interviniese en la zona para crear un corredor verde que uniese el bosque de Can Deu con el Ripoll (más de 80 hectáreas que dotaría a la ciudad de un magnífico y singular espacio).
El Ayuntamiento asumió la iniciativa y en el 2002, con una dotación de más de ocho millones de las antiguas pesetas, se llevó a cabo un concurso de ideas para redactar el proyecto, así como el calendario de ejecución que marcaba la finalización en el 2012. Debido a los recortes presupuestarios y las obras del “metro” la construcción del Parc, no tan solo han estado detenidas durante años, sino que por un acuerdo entre el anterior equipo de gobierno y la empresa constructora, decidieron utilizar ese espacio para acopiar buena parte de las tierras procedentes de las excavaciones en los túneles.
Afortunadamente, la denuncia de esta sinrazón por parte de la Comissió del Parc consiguió la retirada de las tierras. Una victoria vecinal que dejaba vía libre para construir el Parc. Con la eminente finalización de las obras del metro y la entrada de un nuevo equipo de gobierno, todo parecía indicar que era el momento para dar el impulso definitivo y a tales efectos se han mantenido diversas reuniones a diversas instancias.
De entrada el Ayuntamiento manifestó que el proyecto diseñado en la etapa del exalcalde Bustos no era viable ni sostenible, planteando la necesidad de rediseñarlo. En ese estado de cosas y teniendo en cuenta que el parque está considerado como un proyecto estratégico de ciudad, lo consecuente era plantear una alternativa.
En ese sentido, la Comissió con voluntad colaboradora ha venido realizando aportaciones para que se incorporasen en el nuevo proyecto, señalado que primeramente debía replantarse la arboleda que por ‘necesidades del guion’ fue arrancada por las obras del metro.
Con todos los antecedentes, el Ayuntamiento, como responsable de llevar adelante el equipamiento, se comprometió a presentar una propuesta de proyecto para consensuarlo con el vecindario y a partir de ahí, cuantificar su coste y establecer un calendario para su ejecución con las correspondientes dotaciones presupuestarias.
Esa es la lógica que dicta el sentido común, pero nos equivocamos. El Ayuntamiento no tan solo no ha hecho sus labores sino que en la última reunión se presentaron con las manos en los bolsillos y desde entonces, a pesar de haber sido requeridos para reunirnos y salir del estancamiento actual, no se han dignado en contestar. Al tratarse de una situación que raya lo absurdo, la percepción de las asociaciones vecinales es de que se trata de un incumplimiento de sus responsabilidades para con el parque o en el mejor de los casos una dilación tan sospechosa como inadmisible.
No somos técnicos, pero si no son capaces de diseñar un nuevo proyecto para construir el parque (que sería muy fuerte), lo que deben hacer es adecuar el existente incorporando la propuestas que desde la Comissió hemos venido realizando. No cesaremos de luchar por una reivindicación tan antigua como justa como es el Parc Nord, porque la Comissió sí que nos creemos que se trata de un espacio imprescindible para hacer de Sabadell una ciudad más agradable y más ecológica.
Y como los responsables de finalizar el parque es el equipo de gobierno denunciamos que después de casi dos años de mandato todo siga prácticamente igual: en punto muerto. Desencallen ustedes el tema, elaboren un proyecto, consénsuenlo, cuantifiquen su coste y elaboren un calendario para su ejecución y dotaciones anuales presupuestarias. En definitiva, hagan su trabajo y tomen decisiones.
