Aunque pueda parecer que el paso el Estrecho de Gibraltar queda muy lejos de Sabadell, los movimientos de población asociados al retorno de la pobración magrebí a sus países de origen en vacaciones pasan cerca de la ciudad y el resto de la comarca. Por ello, desde el año pasado los Mossos d’Esquadra organizan charlas de seguridad vial entre la comunidad norteafricana.
En esta ocasión, la policía catalana ha atraído un centenar de magrebís y subsaharianos en el oratorio de la calle Cuba (Merinales) para concienciar de la importancia de extremar las precauciones en la carretera. Son 2,5 millones los vehículos que se dirigirán en los próximos días a las diversas formas de pasar de España a Marruecos por carretera. Habitualmente además son coches cargados de personas y productos, con ganas de llegar a sus hogares de origen y ver a sus familias.
Los Mossos han recordado las normas básicas para circular con seguridad pero a través del caso personal de Joaquín, víctima de un accidente y que ha quedado en una silla de ruedas como consecuencia de ello, han llegado a la mayoría de los oyentes. Joaquín, que hace charlas de seguridad con el Instituto Guttman, ha explicado su caso:
Un viernes por la tarde acabamos de trabajar en Ciudad Real y teníamos ganas de llegar a nuestra casa, a Barcelona. Teníamos todo el fin de semana para volver pero nos metimos en la carretera rápido, para llegar cuanto antes. Ni cenamos. Paramos en una gasolinera y compramos patatas y otras cosas para parar lo menos posible. Cuando ya por la noche pasamos Tarragona la fatiga nos pudo. El compañero que conducía se durmió y el coche se estampó contra un muro. Yo me partí el cuello y estuve cuatro meses sin poder mover la cabeza. Ahora aún tengo las manos mal y estoy en una silla de ruedas. Las personas no somos máquinas y nadie nos dice cuando tenemos que hacerlo pero hay que saber cuando parar en la carretera. Teníamos tres días para volver y por llegar rápido me quedé en una silla de ruedas para siempre. Podéis imaginar que es muy duro. Así que por favor, tened cabeza”.
El testimonio de Joaquín ha despertado un sincero aplauso por parte de los asistentes. La policía catalana recuerda que cada coche tiene una carga máxima que no se puede sobrepasar bajo pena de una gran multa, además del peligro que supone. Asimismo, recomiendan “invertir” en seguridad: vigilar la presión de los neumáticos, los frenos, comprobar si todas las luces funcionan bien, planificar la ruta, parar cada dos horas o cada 200 kilómetros, evitar comidas copiosas, respetar los límites de velocidad, colocar un ocupante y no más por asiento y (pese a dirigirse a musulmanes en un oratorio) redundan: no hay que beber alcohol.
“La clave somos nosotros. Vale la pena invertir en descanso y en seguridad. Lo importante es llegar a vuestro país de origen pero lo más importante es que podáis también volver”, ha señalado para acabar el intendente de la Área Básica Policial de Sabadell, Josep Guillot, que ha puesto en marcha las charlas en Sabadell como hizo cuando era intendente del ABP de Manresa.
One Comment