En nuestros días, contar con una buena conexión a Internet se ha hecho fundamental. Si hace unos años queríamos que esta fuese alta para descargar música o ver películas ahora, a razón del teletrabajo y de que todos hacemos consultas diarias online, nos encontramos con un elemento que se ha hecho imprescindible.
Sin embargo, al contratar una tarifa web no siempre contamos con la velocidad que se marca en la factura. Esto, que es algo que no sabe todo el mundo, se ha convertido en un problema para aquellos que sí que necesitan de datos eficientes, de una fibra a la que confiar el trabajo que tenemos que realizar.
¿Qué podemos hacer para mejorar la conexión de Internet en casa?
Una vez que hayamos cogido la compañía telefónica con la que poner Internet en casa, debemos conocer todas las posibilidades que tenemos con la misma. No obstante, existen cantidad de usuarios que no saben cómo aumentar su conexión cuando esta decae, cuando ha bajado literalmente y necesitamos todo su potencia. A continuación, para que lo hagas tú mismo, te dejamos con una serie de trucos:
Escoger 5G (siempre)
La mayoría de los routers que se venden en el mercado trabajan con una doble banda ancha de forma simultánea (2.4 GHz y 5GHz) Es importante asegurarnos de estar conectados al 5G a fin de que haya menos interferencias y de que la velocidad en cuestión sea mucho más alta. ¿Te has fijado en este primer punto?
No satures la conexión
Actualmente, contamos con varios dispositivos en casa y, si todos están conectados a Internet de forma simultánea, puede que la conexión se caiga incluso si has contratado una de las mejores. Tratar de que no todo esté funcionando a la vez es la mejor manera de que el sistema no explote.
Reiniciar el router
Clásico entre los clásicos, reiniciar el router es otra de las cosas que podemos hacer cuando la velocidad no es la que esperamos. Evitando los fallos del sistema operativo, el exceso de calor o alguna incidencia que pueda estar dónde no la vemos, ¿Has notado algo de esto últimamente?
Usar repetidores wifi (para cada habitación)
Suele ser bastante común poner el router en el salón como punto céntrico de nuestro hogar, pero para que la conexión vaya en condiciones, resulta positivo que pongamos repetidores wifi en cada una de las habitaciones en las que trabajamos. Una vez lo hagas, seguro que notas la diferencia de inmediato.
Evitar a los intrusos de conexión
Una conexión lenta en casa puede venir de los intrusos que se enganchan a nuestra red wifi y es que, aunque no lo creamos, suele ser mucho más común de lo que pensamos actualmente. Instalar programas con los que veamos posibilidades de encontrar quién está metido en nuestro sitio se convierte en la forma idónea de dar con el enemigo.
Como vemos, mejorar la conexión a Internet en casa es mucho más sencillo de lo que pensamos. Estos trucos, pensados para que saquemos el máximo rendimiento a lo que contratamos, son clásicos que nunca fallan y que puede que te hagan falta en algún momento del año.
