El proceso por las detenciones el día de la huelga general tropieza.
Los Mossos no se presentan en el jugzado al no recibir la citación, y se pierde una denuncia.
Este lunes debía dar inicio el proceso en los Juzgados de Sabadell para juzgar a la medida docena de detenidos por los Mossos d’Esquadra el día de la huelga general en Sabadell. Pero se pospone ya que los Mossos d’Esquadra no pudieron declarar ante el juez al no ser convocados.
Parece una situación irreal pero no lo es. Mientras una trentena de personas se concentraba pidiendo la absolución de los seis detenidos, uno menor de edad, que se enfrentan a cargos por desobeciendia y desórdenes públicos, los Mossos d’Esquadra que debían declarar no pudieron hacerlo ya que no se presentaron en los Juzgados al no ser convocados.
Este lunes se debía celebrar el primer paso del juicio, con la declaración de los ocho Mossos que hicieron las diligencias ante el juez del Juzgado de Instrucción 5 de Sabadell. Más adelante, debía declarar la defensa, que el fiscal hiciera la petición de condena y celebrarse el juicio, quizás de aquí a un año o más, según la abogada defensora, Pilar Rodríguez. Pero el proceso ha tropezado en la primera piedra.
Visto que los Mossos no podían presentarse en el juzgado porque nadie les convocó, ahora se les ha convocado a declarar a mediados de julio, más o menos cuando debe hacerlo la defensa.
Se traspapela una denuncia
Por otro lado, según publica el semanario La Directa, el juzgado no sólo olvidó notificar día y hora a los Mossos sino que se ha perdido la denuncia por maltratos policiales que presentó un huelguista menor de edad. Ahora, según La Directa, la causa deberá empezar de nuevo.
¿Qué pasó el 29-M?
Durante la pasada huelga general del 29 de marzo, los Mossos d’Esquadra detuvieron a seis personas, una menor de edad, que formaban parte del piqueta de la plataforma SBD Lluitant, formada por diversas entidades alternativas. Ese mismo día fueron puestos en libertad. Denunciaron también agresiones policiales.
Los Mossos cargaron contra el piquete unitario entre las 8 y las 9 de la mañana en el entorno de las calles Brutau o la carretera de Barcelona. Durante ese día, se quemaron varios contenedores y en una manifestación posterior, se rompió una persiana del Mercat Central, además de lanzar pinturas y otros elementos, a las sedes de CiU o el Gremi de Fabricants.
