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El que fuera director deportivo del Sabadell, se ha despedido del que fuera su club durante tres años.
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Dice no guardar rencor a nadie, pese a que desde que llegó Sakamoto, su trabajo ha sido siempre infravalorado.
Cada vez van quedando menos héroes del ascenso a segunda división. Una de las cabezas visibles era Xavi Roca, que hoy se ha querido despedir en una rueda de prensa en la Nova Creu Alta.
Ante una decena de periodistas y gente de confianza, Xavi Roca Mateo, ex capitán arlequinado y ex también ya director deportivo del Sabadell, ha querido responder a todas las cuestiones que podían quedar en el tintero después de su dimisión el pasado jueves, por no sentirse valorado dentro del club:
Hoy es un día difícil. Quiero agradecer al Sabadell y todos aquellos que confiaron en mí en su día, porque llegué como un profesional y me marcho como un arlequinado más”.
Se le notaba en el rostro que era un momento complicado para él, ha pasado muchos momentos en la entidad vallesana, y la mayoría de éxitos, sobre todo como director deportivo. Se ha emocionado cuando ha agradecido el apoyo a su mujer, presente en la sala, y ha podido hacer un balance de todo el tiempo pasado aquí:
Es difícil hacer un resumen de todo el tiempo que he estado aquí, pero he intentado hacer siempre el bien para el club, cosa que nadie me puede retraer. Al final no he tenido la confianza de quien la tenía que tener y era absurdo que siguiera aquí, porque no podía tomar mis propias decisiones”.
Al final todo se resume en eso: confianza. Roca no la ha tenido por parte del presidente y sus más allegados, quedarse aquí, como él bien dice, hubiese sido absurdo. Lo que está claro es que el ex director técnico nunca ha tenido una palabra más alta que otra con nadie, siendo una tumba total a la hora de desvelar fichajes, y trabajando como el que más para conseguir éxitos para el club, que al fin y al cabo, repercute positivamente en él. Se va un héroe del ascenso, en este caso en los despachos, y una gran persona.
