El verano es perfecto para disfrutar de la libertad que da subirse a un barco y surcar el mar.

Todos deseamos que lleguen las ansiadas vacaciones de verano. Una época fuertemente ligada a disfrutar del sol y el buen tiempo. Puede que hayamos planificado con meses de antelación el alojamiento en el que pensemos pasar unos días. Aunque hay una forma de vivir las vacaciones que no se suele mirar porque se considera que es demasiado cara, cuando lo cierto es que no lo es. ¿Te has planteado alguna vez disfrutar unas vacaciones a bordo de un barco?

Una experiencia de lujo a precio asequible

Aunque no te lo parezca, el alquiler velero está al alcance de la mano. Si miras cuánto cuesta una habitación de hotel, comparando el coste de un barco y teniendo en cuenta que pueden viajar 6, 8 o más personas dependiendo del modelo, puedes llevarte la sorpresa de que sale incluso más barato que alojarte en tierra. Solo tienes que reunir a unos cuantos amigos o familiares, con los que seguro que estás planificando el próximo viaje, y daros el lujo de navegar este verano.

Acceso a las mejores playas

Viajar en velero ofrece la oportunidad de llegar a calas inaccesibles a no ser desde el mar. Podrás tomar el sol en playas que no están aglomeradas, con aguas claras y arena limpia. En un espacio íntimo y alejado de las tradicionales playas turísticas, que en verano parecen calles de las ciudades más pobladas del planeta.

Si lo que buscas en vacaciones es descansar y pasar unos días en tranquilidad sin renunciar al sol y el mar, un velero es la mejor opción.

Di adiós a las vistas desagradables

Habitaciones de hotel que dan al interior, apartamentos “en primera línea” que se topan con una pared de ladrillos o vistas al mar que solo son accesibles si sacas medio cuerpo por la ventana. Seguro que te suena, ¿verdad? Con un barco no tendrás que preocuparte por las vistas que vas a tener. Podrás elegir dónde echar el ancla y disfrutar de un atardecer rojizo junto a la bahía, cenar bajo un manto de estrellas y hasta descubrir los puertos más bonitos de los alrededores.

Fiestas nocturnas sin quejas

Si te gusta organizar fiestas 30cuando cae la noche, en un edificio de apartamentos o en la habitación del hotel será imposible. Al menos no sin tener que soportar las quejas de los vecinos. El alquiler de barcos ofrece también la posibilidad de hacer fiestas sin molestar a nadie. Solo tienes que adentrarte en el mar y poner la música todo lo fuerte que quieras a unos cuanto kilómetros de la costa.

Por supuesto, no tienes por qué dejar la fiesta solo para la noche. Puedes pasarte todo el día disfrutando con tus amigos de baños y música hasta que el cuerpo aguante.

Ideal para niños

Si viajas en familia, subir a los niños a un barco será una experiencia que recordarán toda su vida. Observar especies marinas en su entorno, localizar lugares en los que bucear o darse un buen chapuzón y disfrutar de deportes acuáticos son actividades ideales para compartir con los más pequeños.

Un descanso sin igual

Aunque hay quien piensa que un barco no es precisamente cómodo para dormir, lo cierto es que es todo lo contrario. Quienes lo han probado aseguran que no  hay nada como dejar que las olas te mezan mientras duermes. Lo que unido al sonido del mar convierte las noches de descanso en ideales.

Si aún no has pensado en cómo disfrutar de tus próximas vacaciones, deberías plantearte seriamente buscar un barco y vivir una experiencia singular.