L’ESTAT DE LA CIUTAT
Los movimientos de la pasada semana, reseguidos a través de los grandes clásicos de la historia del cine, indican que la crisis política abierta por la Operación Mercurio se acerca a su desenlace. Una solución política que todo apunta no vendrá de los grupos municipales de Sabadell, sino de las negociaciones entre los partidos en Barcelona.
El pleno del martes 8 de enero profundizó la confrontación entre gobierno y oposición hasta un punto de no retorno. Media hora antes de la sesión, los portavoces de los grupos opositores anunciaron que votarían en contra de todos los puntos del orden del día como respuesta a la negativa del PSC a cesar a los cargos públicos y de confianza imputados en la presunta trama de corrupción urbanística.
Ante este sombrío panorama el alcalde accidental, Juan Carlos Sánchez, decidió retirarlos. De manera que sólo se debatió la moción conjunta de la oposición donde se reprobó al alcalde Manuel Bustos y a Juan Carlos Sánchez y se instó al resto de ediles imputados a dimitir de sus cargos. Una auténtica carnicería política que evocó por momentos al mítico film La matanza de Texas donde los portavoces de la oposición, provistos de sierras mecánicas discursivas, descuartizaron al equipo de gobierno.
Ramon Burgués, como en el gran clásico del western Solo ante el peligro, se encargó de defender las posiciones del equipo del gobierno, pero a diferencia de Gary Cooper que consigue vencer a los malvados, cayó acribillado por los disparos dialécticos de la oposición. Ni siquiera Sánchez, que como alcalde accidental podía intervenir sin limitación de tiempo, acudió en su ayuda.
Si el papel de Sánchez en esa crisis evoca al personaje de Marlon Brando en La ley del silencio, esa inolvidable producción de Elia Kazan, la conducta del grupo municipal socialista parece sacada de Los últimos de Filipinas que relata la heroica defensa del último bastión español en esas islas en 1898, cuando también se perdió Cuba.
Por ello me atrevo a recomendar, tanto a Juan Carlos Sánchez como al grupo socialista, la película Abre los ojos de Alejandro Amenábar.
Fraude de ley
El comportamiento de Bustos, el gran ausente de la sesión, fue objeto de las más duras y justificadas críticas. En efecto, el alcalde, asegura que continúa ejerciendo plenamente el cargo y que sólo ha cedido las funciones de “representación institucional” en la persona de Sánchez. De hecho, cada día se presenta puntualmente en su despacho de alcaldía como si no hubiera pasado nada.
Esto constituye una burla, un fraude de ley, al decreto de alcaldía accidental que sólo contempla tres supuestos: ausencia, vacaciones y baja por enfermedad, ninguno de los cuales se ajusta a su situación de imputado de diversos delitos contra la administración pública en espera del levantamiento del secreto del sumario.
Otra muestra de un estilo de gobierno, excesivamente habituado a moverse en el filo de la legalidad. Bustos se parece cada vez más al Nixon de la magnífica película de Oliver Stone, protagonizada por Anthony Hopkins, que transcurre en los últimos días del controvertido presidente de los Estados Unidos antes de presentar la dimisión por el caso Watergate.
Pensándolo bien, el robo de los ordenadores de la sede de Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) guarda alguna semejanza con el allanamiento a la sede del comité nacional Partido Demócrata que desencadenó el escándalo como se muestra en el film de Alan J. Paluka Todos los hombres del presidente, protagonizado por Robert Reford y Dustin Hoffman.
¿Falso culpable?
Preferiríamos no tener que pronunciarnos sobre la entrevista de 40 minutos que el alcalde concedió a la emisora municipal Ràdio Sabadell el pasado viernes, pues nos obliga a adentrarnos en géneros cinematográficos más escabrosos que van desde el melodrama, al terror, la ciencia-ficción y la pornografía.
Bustos respondió al cuestionario de la entrevistadora, en el papel de Linda Lovelace del mítico film Garganta profunda del gran realizador Gerard Damiano que revolucionó el género. Empezó, sin que nadie se lo pidiera, desmintiendo maliciosos rumores como los relativos a la construcción de una residencia de lujo en Bellaterra o a la enfermedad de uno de sus hijos que le condujeron al borde de las lágrimas y a un emocionante silencio radiofónico digno de las mejores secuencias de Los puentes de Madison.
Acto seguido quitó importancia a las graves imputaciones que penden sobre él y atacó a la oposición por no respetar la presunción de inocencia y montar un juicio paralelo donde ya ha sido juzgado y condenado como en Falso culpable de Alfred Hitchcok, protagonizada por Henry Fonda, donde un honrado ciudadano confundido con un delincuente vive una auténtica pesadilla personal y familiar hasta que consigue demostrar su inocencia.
Aseguró disponer del apoyo de la dirección del PSOE y PSC y contar con el cálido apoyo de la ciudadanía. De manera que, cuando se levante el secreto de sumario y se descubra que todo ha sido un montaje, volverá con todos los honores a la alcaldía. Un relato fantástico digno de la saga de La guerra de las galaxias de George Lucas donde Bustos se presenta como un noble caballero Jedai luchando con las oscuras fuerzas del mal, pero que en realidad se asemeja más al Golum de El Señor de los Anillos con la alcaldía como tesoro.
También puede encontrarse cierto parecido a la conducta del alcalde con el papel del psiquiatra de El sexto sentido, interpretado por Bruce Willis, quien al final de la película descubre que está muerto.
Mentideros políticos
Dejando estas ilustrativas metáforas cinematográficas, diferentes fuentes indican que la dirección nacional del PSC mantiene conversaciones con distintas formaciones de la oposición para hallar una salida a la crisis de Sabadell.
Con la prudencia y el escepticismo recomendados al evaluar unas conversaciones que oficialmente no existen, pero de las que todo el mundo habla, parece ser que desde la calle Nicaragua, sede barcelonesa del PSC, estarían dispuestos a cesar a todos los imputados a cambio de retener la alcaldía y contar con el apoyo de alguno de los grupos de izquierda del consistorio para salir del bloqueo institucional.
El problema radica en que ICV estaría dispuesta a aceptar esta fórmula, pero no en solitario a causa del eventual desgaste político y electoral que esto podría suponerle. Así reclama que al menos EUiA –sus socios en todas partes menos en Sabadell- se sumen al equipo de gobierno para compartir esta responsabilidad.
Sin embargo, EUiA no estaría por la labor y preferiría continuar ejerciendo la oposición, acaso por el temor de ceder este papel crítico, a Entesa o CUP, lo cual pondría en peligro su representación municipal, si no recompone la coalición con ICV y no consigue articular un amplio acuerdo estilo Syriza con otras fuerzas de izquierda de la ciudad. Por otro lado, sería difícil que Entesa per Sabadell, después de ser la única formación que siempre ha estado en la oposición a Bustos, se avenga ahora a integrarse en un gobierno presidido por un socialista.
Unos obstáculos que dificultan extraordinariamente la salida de la crisis y que podría resolverse in extremis con un gobierno monocolor socialista, sin imputados, que gobernarse, como hasta ahora, buscando apoyos puntuales con los distintos grupos de la oposición.
En cualquier caso, tras el receso de las vacaciones de Navidad, la situación de bloqueo político e institucional se ha hecho insostenible y deberá resolverse en las próximas semanas.
Cuando se lee algún artículo de Antonio Santamaría, casi siempre suele ocurrir que se despejen algunas dudas, o que se puedan encontrar el por que a determinadas posturas.
Como todos los que estuvimos siguiendo el último pleno, en este pudimos ver las manifestaciones más o menos contundentes de toda la oposición contra el equipo de gobierno, reprobando a Bustos, al alcalde accidental Juan Carlos Sánchez, así como a los demás imputados. En este pleno vimos también, como ICV por un lado criticó con contundencia la postura de los imputados, y por otro, “tendió” la mano al PSC o al gobierno local. Ofreciéndole la posibilidad de apoyar un gobierno formando por no imputados, (basándose en que el PSC había sido el más votado).
De acuerdo con lo que dice Santamaría en su artículo, (al parecer, se han reunido las direcciones de ICV y PSC para buscar una salida a la situación creada en nuestra ciudad), y parece que estarían de acuerdo en que ICV apoyaría un gobierno del PSC (sin los imputados). Quizás sea por esto, la postura que ICV tomó en ese pleno, aunque como se apunta, EUiA en Sabadell no estaría por esta labor. Lo que dificulta en gran medida que este “posible acuerdo” no esté ya sobre la mesa.
Es verdad que la oposición hasta ahora se mantiene hecha un “bloque”, pero todos apreciamos que se encuentra con cierta “debilidad”, o que no actúan todos los grupos con la misma contundencia. Hace unos días se dijo, que CIU le interesaba alargar la situación actual al máximo con el fin quemar al PSC local. Ahora ICV se desmarca del resto de grupos ofreciendo un pacto al gobierno de Bustos. Lo que demuestra que la unidad de la oposición pasa por tener ciertas dificultades.
Cuando tendríamos que estar criticando todo lo que ha hecho y está haciendo Bustos en nuestra ciudad (sin olvidar que también ha sido “con el consentimiento del PSC”), o del caso Mercurio, debido a “intereses partidistas”, o de sus direcciones, estamos hablando de lo que hace la oposición. Lo cierto es que posturas como la que ha tomado ICV o la que tomó CIU, nos lleva ha tener que hacerlo.
Hace unos días, ICV nos sorprendía dando un “ultimátum” de 15 días para la dimisión de todos los imputados http://goo.gl/KmISn La explicación a esa sorprendente toma de posición, quizás esté en ese posible acuerdo de ICV-PSC, por que de otra forma no se entiende ese ultimátum.
Si como consecuencia de ese posible acuerdo, ICV en solitario apoyara un gobierno del PSC (sin los imputados), me temo que seria la muerte política de ICV, dado que no entenderíamos de ninguna forma que estuviera dando gobernabilidad a los que han hecho de Sabadell su “cortijo” sin contar todas las ‘tropelías’ que han cometido y todo lo que pueda salir del caso Mercurio.
ICV no puede andar ahora, y con la ‘excusa’ (de que son la “mayoría de los sabadellenses los que han votado al PSC), brindar un apoyo a un gobierno que sabe de antemano que no hará la limpieza que propone, que de hacerlo, solo apartaran a lo sumo, a los imputados, “olvidando” que ¿No se le puede dar un derecho democrático a los que han estado pisoteando los derechos de los demás? Por consiguiente (y desde ese talante democrático), no es cierto, que el PSC (a nivel general en Sabadell) haya obtenido la mayoría de votos (véase la suma total de toda la oposición) http://goo.gl/V4kVe Lo que no justifica (de ninguna forma), esa mano tendida de ICV al gobierno de Bustos.
Por otra parte, ICV (a nivel de dirección, y con el fin de que no se quemen solos), intenta conseguir el apoyo de EUiA en ese hipotético acuerdo que seria PSC e ICV-EUiA. Por lo que se ve ‘improbable’ un acuerdo de estas características. Los votantes de EUiA, creo que tampoco entenderían ese pacto (y conociendo a su responsable Marisol Martines) dudo que esta entraran en este tipo de juego. Aunque en política todo cabe, hay está la posición de ICV.
Por consiguiente, es lamentable (que por el solo hecho de intereses partidistas), no se puedan alcanzar unos acuerdos por los cuales fuera la oposición en su conjunto la que echara a estos impresentables, aplicando lo que está en sus manos, la moción de censura. y no esperar que sea la justicia o el acuerdo de algún grupo el que lo haga. Ni Bustos, ni nadie de su equipo, incluido su partido PSC, tienen la confianza (en estos momentos) de la mayoría de los ciudadanos.
Lo que no lleva a pensar que a la ‘casta’ política (en mayor o menor medida), los intereses de la ciudadanía le importan un bledo. De no ser así, Bustos con todo su ‘impresentable’ equipo ya tendrían que estar fuera del gobierno. Ahora no valen excusas, la oposición tiene en sus manos el poder hacerlo.
¿Y si no es así… que expliquen a la ciudadanía los motivos por los cuales no se aplica la moción de censura?
En sólo ante el peligro (gran película donde las haya) hay una escena que no debe pasarnos desapercibida y debe hacernos reflexionar de lo que es el pensar popular.
Grace Kelly, la jóven esposa del Sheriff Gary Cooper, como en la estación de tren están los forajidos esperando a su jefe, pide permiso para esperar en el holl del hotell la hora de la llegada del tren, que ella quiere coger porque no quiere ver como matan a su marido.
En ese momento el recepcionista del hotel se dirige a ella muy serio y como increpándola le dice: Sra, usted es la esposa del Sheriff, verdad, perdóneme que le diga que antes de venir su marido a poder orden en este pueblo y encarcelar a (no recuerdo el nombre del jefe de los foragidos), este pueblo tenía más ambiente, circulaba más el dinero y todos vivíamos mejor. ….