Foto portada: Garcia Barroso, a la sortida dels Jutjats, divendres passat. Autor: David B.

Sabadell Lliure de Corrupció, contra la suspensió de la condemna als germans Bustos

La plataforma Sabadell Lliure de Corrupció, que exerceix l’acusació popular en el cas Mercuri, ha carregat amb força contra la suspensió de la sentència als germans Bustos i l’exdiputat Daniel Fernández que va dictar divendres el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC). La plataforma considera alguns aspectes de la decisió com una “burla a la lluita contra la corrupció”.

Especialment indignats es mostren des de l’acusació popular pel fet que els penats es puguin acullir a un pla de forma en bones pràctiques a l’administració si volen reduir el termini de suspensió de la llicència de cinc anys a dos anys. Un fet que la plataforma, formada per partits d’esquerres i ciutadans a títol individual, considera una “burla”.

Considerem [la mesura com a] poc seriosa i una burla a la lluita contra la corrupció, ja que amb ella s’obvia completament que els acusats Manuel i Paco Bustos estan imputats en altres sumaris que es troben en fase d’instrucció per haver comés altres presumptes delictes contra l’administració pública mentre exercien com a càrrecs electes.

La plataforma Sabadell Lliure de Corrupció considera que l’ingrès a presó hauria tingut un efecte dissuasori. A més, mantenen que “mai han manifestat el més mínim penediment”, a banda d’estar immersos en altres peces separades del cas Mercuri. Manuel Bustos, Paco Bustos i Daniel Fernández van ser condemnats a un any i quatre mesos de presó, una multa de 60.000 euros i la inhabilitació especial per a l’ocupació o càrrec públic electe per un termini de quatre anys, sis mesos i un dia com autors responsables d’un delicte de tràfic d’influències.

Com és habitual, tractant-se de la primera condemna, i sent inferior a 24 mesos, els tribunals han permès no ingressar a presó als penats. A més, els ha permès pagar la sanció de 60.000 euros en una vintena llarga de terminis.

Foto portada: un dels advocats de Sabadell Lliure de Corrupció, Raúl Garcia Barroso. Autor: David B. 

2 Comentaris

  1. PASADO, PRESENTE Y FINIQUITACION DEL CASO MERCURIO.
    Me ratifico en mi anterior comentario en cuanto al derecho de Manuel Bustos a los beneficios de la condena condicional, al carecer de antecedentes penales y ser la condena por el caso Montcada inferior a dos años de prisión, tal y como ha sido reconocido por la ejecutoria del TSJC. Sin embargo tal ejecutoria aporta un dato que me hace pensar que el caso mercurio está finiquitado y lo que quedará del mismo no será sino espuma de borraja.
    Será quizás por la ola de calor que estamo ssufriendo, pero antes de entrar en el tema quisiera me permitirán que me explaye un poco y contextualicer los inicios de la pieza principal del llamado caso mercurio, pieza de la cual yo sostuve en su momento, antes de que las diligencias se hicieran públicas, que tal pieza tendríamos que deducir que el caso mercurio no era tanto el caso Bustos, como el caso Partido Popular de Sabadell, pues pepero era el denunciante, Nicolás, pepero el denunciado Soriano, pepero era el constructor Melquiades Garrido y básicamente peperos el resto de afectados por dicha pieza principal de cobro de comisiones por las adjudicación de obras. Esto lo digo ciñéndome a lo que hay en dicha pieza principal, lo que no está en el sumario es como si no existiera, aunque todos podamos tener el firme convencimiento de que sí que existió.
    En mayo de 2010 se hizo público mi nombramiento como presidente de la junta local del partido popular de Sabadell, lo cual, al parecer, hizo saltar todas las alarmas. Lo primero que me prepararon los bustistas (bastantes de ellos infiltrados en el PP) fue una entrevista trampa en radio Sabadell donde, ante la insistencia hasta la saciedad de la entrevistadora, más comisaria que entrevistadora, acabé admitiendo que yo no quería ser concejal, de hecho yo no quería ser nada en Sabadell (cosa cierta, puesto que conozco el paño) y dada mi impericia política y mi carácter bromista añadí: …”bueno, pero si me ofrecen la Consellería de Justicia quizás me lo piense”. La broma se magnificó hasta unos extremos nauseabundos, pero quedó cortada en seco cuando manifesté por email a la dirección del PP, que podían ir buscando a otro, que yo no tenía ningún inconveniente en dimitir. Que conste, y no es falsa chulería, que me sobra curriculum para haber sido Conseller de Justicia, pero soy consciente de cómo funcionan las cosas en Cataluña, (con su pan se lo coman).
    El segundo episodio curioso que sufrí fue justo al mes siguiente: Me pide hora una señora desde un móvil, con lo que no le puedo localizar la llamada, pero me da su nombre y apellidos y sólo por ello ya sé quién es, es una señora de las varias que hay en Barcelona que pululan por la administración de justicia y cuya función es coser a quejas y denuncias a según tal o cual juez o secretario judicial, alguien las envía y alguien las paga naturalmente. Paseando por la Rambla me encuentro con Santamaría y le expongo mi preocupación de que creo que esta señora me la han enviado a propósito para montarme el poyo, y entonces Santamaría me dice: “ten cuidado, no te vayan a poner un micrófono en el despacho”. ¿A mí, porqué?.
    A la tal sra. la traté de un amanera exquisita, si bien no supo decirme cómo había conseguido mi tarjeta, ni quién le había recomendado mi persona. El asunto que me planteaba se las traía, funcionaria del ICS próxima a la jubilación, al parecer todos los médicos la acosaban sexualmente y no sólo eso, sino que la DGIA le había retirado la custodia de una hija adoptiva y quería denunciar a Dios y su madre empezando por el Conseller de Sanidad. Como he dicho mi trato hacia ella fue exquisito y después de darle muchas vueltas pude deshacerme de ella aduciendo que Colegio de Médicos aún no había resuelto una de las muchas denuncias pendientes y que era mejor esperar a ver que decía dicho Colegio de Médicos. Quedamos que en julio volvería a llamarme, naturalmente para entonces yo buscaría una excusa para no tener que atenderla. Acabada la visita respiré tranquilo, pero entonces me acordé de las palabras de Santamaría… “ten cuidado no te vayan a poner un micro en el despacho”. Así que más en broma que en serio paso la mano por debajo de la tabla de la mesa del despacho en la parte que da a los clientes y por un momento me quedé de piedra, toqué algo, me agaché metiendo la cabeza bajo la tabla y allí estaba, adherido adhesivo, muy fuerte por cierto, porque me costó arrancarlo, era como la mitad de la boquilla de un cigarrillo del cual colgaba un hilillo de no más de un cm,. Mirando por internet qué podía ser aquello, resultó que aquello podía ser un transmisor de los que se activan por la voz y duran lo que dure la batería. Esto fue motivo de choteo por parte de algunos incrédulos, alguno de los cuales, curiosamente como después se supo, tenían ya su teléfono pinchado desde el mes de febrero anterior. El permitir pinchar el teléfono a un abogado fue lo que formalmente le costó su carrera al juez Garzón.
    Dicho lo anterior, que sólo adquiere sentido real con todo lo que ha pasado después, y volviendo al tema del presente y futuro del caso Mercurio, el TSJC ha hecho una cosa que según mi opinión finiquita el caso mercurio en un plazo no superior a dos años. Ha reducido la suspensión del cumplimiento de la pena de prisión de la única condena existente del caso mercurio de 5 a 2 años, con la condición de que los condenados hagan un curso de buenas prácticas. Bien, lo del curso de buenas prácticas es lo de menos, lo importante es la reducción a dos años, en dos años los condenados habrán cumplido la pena y se cancelarán sus antecedentes penales. En los próximos dos años no hay tiempo material para que la fiscalía anticorrupción o la acusación particular obtengan otra condena firme de ninguna de las otras piezas de caso mercurio. En los próximos dos años se cumplirá el punto final de los casos de corrupción en España que están en fase instructora, gracias a la reforma habida a finales del año pasado de la Ley de Enjuiciamiento Criminal que establece unos plazos máximos de instrucción, con prórrogas en determinados supuestos, pero plazos máximos al fin y al cabo.
    No sé si dentro de tres años volveremos a ver a Manuel Bustos como alcalde de Sabadell, pero mi opinión, y no suelo equivocarme, es que el caso mercurio se ha terminado.

    Antonio Vega Reina
    Abogado en Ejercicio
    ExMagistrado Juez Sustituto
    En Letrado del Estado Sustituto

  2. Y nadie dice nada? Mira que aquí hay tela…